Los procesos de negocio son actividades que conllevan a conseguir un objetivo organizativo especifico, desarrolladas por actores que representan diferentes roles dentro de la empresa. Las cadenas de valor y los procesos de negocio producen salidas, es decir, productos o servicios, que son valorados por lo clientes.

Las actividades que ejecutan los procesos se relacionan con otras dependencias de recursos (necesidades entre consumidor y productor) y dependencias de control (ninguna actividad puede iniciar sino se ha finalizado la anterior). Los procesos de negocio se caracterizan por ser una colección de datos producidos y manipulados a través de un conjunto de tareas, donde determinados agentes participan mediante un flujo de trabajo determinado. Finalmente, estos procesos se hallan sujetos a un conjunto de reglas de negocio, las cuales van determinando las políticas y estructura de la información dentro de las organizaciones.

Actualmente la tecnología juega un papel importante en las organizaciones, debido a que ha posibilitado adelantos importantes en cuanto a la velocidad y agilidad con la que se mejora su rendimiento. Por lo anterior, con el fin de lograr la nueva configuración respecto a procesos de negocio en las organizaciones, estos se deben integran con Business Process Management (BPM).

BPM es una combinación de avances técnicos con métodos y prácticas establecidos utilizados para diseñar, representar, analizar y controlar procesos operacionales y que permiten la respuesta continua a eventos y condiciones del mundo real. Por lo tanto, mediante BPM dichos procesos son más efectivos, más transparentes y más agiles.